miércoles, 21 de septiembre de 2011

Primera semana de clase.

UFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFFF...
Ya ha empezado el curso. Con lo bien que estábamos la semana pasada... Haré una cadena para que veáis que me parece la universidad:
Bruselas: Capital de Europa. Bruselas: Ciudad idealizada. Bruselas: punto de encuentro en Europa. Bruselas: Erasmus de todo el mundo vienen a ella. Bruselas: Maravilla. Universidad de Bruselas: CAOS.
¿Os podéis creer que han empezado las clases y aún el horario no está terminado? Aparte de que allí nadie sabe nada y el lío que es ir de un sitio a otro... Batiment A porte Y 2étage porte 115. Y en el papel tienes SAY2115. Ea, ¡avíatelas como puedas! Cuando por fin encuentras tu edificio, ponte a buscar la puerta por la que tienes que entrar y cuando entras, subes a la segunda planta pero... ¡NO, ya estabas en ella!
Comienza la clase. En el horario pone que durará una hora pero, te das cuenta de que cuando pasa la hora el profesor da "un descanso" y sigue otra. Dos horas de clase. ¿Y desde cuándo se empieza dar clase desde el primer día?
Profesores. Un poco de todo: simpáticos, aburridos, graciosos, severos...
Lo peor fue mi primer día en clase, a primera hora. Llego tarde (como casi todo el mundo) cosa que no quería (pero cualquiera llega a la hora con lo grande que es eso y perdiéndote). Abro la clase "¡Mierda!". Todas las miradas hacia mí... Sí... soy la Erasmus de la clase. Pasa unos diez minutos y se vuelve a abrir la puerta "¡Bien!" es Emil, un canadiense que al verme también se sintió "arropado". En fin, la clase la verdad es que era muy interesante porque es una comparación de las gramáticas de las lenguas romances así que tocamos un poco de francés, español, italiano, portugués, rumano, occitaine y catalán.
Termina la clase y vi en el horario que la siguiente la tenía en ese mismo aula así que decido quedarme dentro. Espero... Espero... ¿por qué no hay ruido fuera? De pronto, oigo cómo alguien intenta abrir la puerta de la clase pero no puede. Me preparo tipo "yoacabodellegaraquíyestoymirandoelmóvil" pero me doy cuenta de que siguen sin poder abrir la puerta. Decido levantarme y dirigirme a la puerta para abrirla y salir, huír, porque me temía lo peor. Pues sí, efectivamente... Me había quedado encerrada en clase. Y los que intentaban entrar eran los alumnos de la siguiente clase. Cojo el móvil pensando en llamar a alguien pero... ¿a quién? Empujo la puerta, vuelvo a empujar... Otra vez... Y otra... Y se hizo la luz: vi un pequeño botón que ponía "Ouvrir la porte" ("Abrir la puerta"). Lo pulso y ¡pum, click! La puerta se abrió. Y fuera tenía a mi nueva clase mirándome... Por dentro pensaba "Nononononono! ¿por qué a mi?" Pero en cambio dije "Salut! Ça va? Il n'y a pas de cours?" Y me contestaron que efectivamente, no, no había clase porque empezaba la tercera semana de clase. Así que sonreí... Y salí de allí "corriendo" porque me costó encontrar la salida del edificio.
El resto del primer día fue bien: comí con Anna y Maddi y por la tarde asistí a otra clase que me recomendó Emil para ver cómo va. Se llama Autores Canadienses y parece bastante interesante pero dura a la vez, ya que es de Máster. Además, se nos presentó una belguita muy simpática al oírnos hablar entre nosotros con la mezcla de inglés-francés-español. Es que Emil es de la parte inglesa, pero también habla español. Alors, quiere practicar español, pero le sale en inglés, aunque también el francés. Cada vez que hablamos cogemos un idioma distinto, o cambiamos durante la conversación.
Llegué a casa... y me puse a buscar combinaciones con el horario.
Ah bueno, y antes o durante eso, activé la nueva tarjeta de móvil porque teníamos 10euros gratis y con ellos 400 sms gratis! Ahora estamos todos todo el día escribiéndonos sms, porque además si en vez de 10, recargamos 15euros son 4000 sms gratis y 4000minutos gratis de llamada. ¡Yuuuuuuuuuuhu!

Al día siguiente fui a clase a las 8h. Sí... porque por el horario que tengo ahora, todos los días entro a 8h. Eso sí, los viernes no tengo clase.
Tenía Alemán. Sí señores, he empezado a dar alemán, a ver qué tal se da. Sandra y Andreia iban a venir, pero les surgió un imprevisto ¡y me dejaron sola ante el peligro! Llegué a la clase, tarde también por perderme, y me veo la clase a reventar de gente y con algunos alumnos sentados en el suelo, así que me tocó estar en el suelo. Menos mal que llegó una belguita de la que me hice amiga y así nos enterábamos mejor de la clase. Aún así, con más de 50 personas no se puede dar un idioma así que como el próximo día siga así de llena... me cambio. Encima, en esa clase van a meternos otra hora más a la semana, pero no saben bien el día ni las horas, lo tenemos que decidir los alumnos.... vamos... un lío impresionante.
Salimos mi amiga belguita (Alice) y yo y fuimos a preguntar a secretaría pero nos dijeron que no tenían ni idea blablabla. Así que como era tan pronto la siguiente clase la tenía a las dos de la tarde (sí... 4 horas más tarde), me volví a casa... desayuné... hice la compra... me hice de comer... y volví a la facultad.
Me crucé varias veces con la señora turca de la familia y fue muy amable. Estuvimos hablando un rato y no me paraba de repetir que nosotros éramos ahora como una familia, porque todos teníamos a la familia lejos y estábamos allí todos juntos... La verdad es que no se callaba. Pero fue muy simpática, eso sí.
Por la tarde tuve a un profesor que era bastante guay. El típico que llega sin papeles y te empieza a hablar poniéndote buenos ejemplos por lo que te enteras de todo perfectamente.
Al salir de clase, me fui para el barrio y quedé con Maddi y Anna para dar un paseo por allí. Encontramos una tienda digamos de... "veinte duros" pero que vendía también comida. Era de unos judíos, bastante cómico el ver cómo el judío te cobraba y contaba el dinero.
Quedamos en que después de dar el paseo, iría a su casa a cenar pero sinceramente... estaba taan cansada que sólo me apetecía llegar y dormir. Así que llegué, seguí con las asignaturas... me hice de cenar y me dormí.

Al día siguiente me tocaba lo mismo: clase a 8h y después a 14h. Hoy ha ido mejor el día, supongo que también porque he descansado más. Me hice de comer un kebab de cosecha propia (te lo daré a probar, Gonchi!) Y bueno, la clase de la mñn bien pero la de por la tarde bastante miedo porque es la típica profesora que mete miedo, que se hacen exámenes todas las semanas y si no haces uno ya no tienes derecho al examen final, que por cierto es oral y si dejas incompleto lo que te pregunte ya estás suspensa... MIEDO. Además, me he hecho amiga de una belguita que es la tercera vez que se presenta a esa asignatura...
Así que al llegar a casa me puse a mirar asignaturas y puede que la cambie por otra, porque parece muy interesante pero estoy un poco harta de profesoresamargaasingaturas, la verdad. ¡Sólo por eso me entran ganas de ser profesora a veces!
Menos mal que a la salida de clase me volví con Anna y Maddi, y por la tarde, mientras buscaba asignaturas, estuve hablando con varios Erasmus vía Facebook. Es que después de pasarme una semana entera con ellos todos los días, ahora se les echa de menos...

Foto de mis amigos, los yankis en la journée sans voiture.
Además, estos días nos está entrando a Sara y a mi un pavo más grande cuando estamos juntas... Esta tarde, después de clase tenía unas ganas tremendas de chocolate, o pain au chocolat o algo así. Pues bien, llegué y no tenía nada de eso en casa, así que decidí comerme una manzana. Pero al rato, llegó Sara y me dio unos gofres de estos de Carrefour ya hechos pero con chocolate... Mira... qué cosa más rica... ¡Y yo que pensé que iban a estar asquerosos por eso de estar envasados! Obviamente no son como los que te tomas calentitos, pero tienen un punto bastante rico.
Por la noche quedamos en la Place Flagey con Irene, Antonio, Patri, Myriam y demás españoles de los que me alejé, para ver el partido del Barça.
Eso sí, he descubierto EL SITIO para tomarse las frittes. Es un puesto (tipo el puesto de las patatas fritas de Sanlúcar) en medio de la plaza... ¡¡riquísimas!!
Estuvimos un rato viendo el partido pero nos volvimos las tres pronto a casa para coger el tranvía y eso... ¡que mañana toca otra vez clase a 8h!

En fin... ¡a dormir!

1 comentario:

  1. Ah ça, on t'avait prévenu que les premières semaines de cours c'était un lio impresionante :p tu vas t'en sortir tu verras :D et plus tard ça te fera marrer !!!!

    En tout cas note bien le puesto perfecto pour les frites, quiero iiiir :D hihihihihihi

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