miércoles, 30 de noviembre de 2011

Dimanche: Marché, Cinéma et Concerts.

El domingo por la mañana (más bien la mediodía...) fui con Valérie al Marché du Midi ya que lo quería conocer y así hacíamos más quedadas Tandem.
El problema fue que cuando nos dimos cuenta estábamos bajo una tormenta pero bueno, nos estuvimos refugiando bajo algún stand de los más grandecitos.


Estuvimos esperando a Emil, que iba a venir con nosotras, pero llegó justo cuando nos íbamos: apareció con toda la cara de dormido, con su bolsa para hacer compras, su gorro y mojado. ¡Estaba hecho un cuadro! Pero nosotras nos fuimos porque acabamos corriendo por el mercado hasta llegar a la boca de metro por la lluvia.
Normalemente, íbamos a ir al Mercadillo de Navidad al centro pero con el bonito día que se puso, decidimos comer algo e ir al cine. Vimos Tintín y no me pareció tan tan horrible como la pintaban, la verdad. A ver... no es genial pero está entretenida y bien para pasar el rato, aunque por supuesto me quedo con los cómics y películas de los dibujos.
Por cierto... había que pagar para ir al baño del cine, ¡terrible! Y tuvimos esa buena suerte de llegar, comprar las entradas, salir a buscar algún sitio para comer y ver el cielo despejado. B I E N. Pero bueno, ya teníamos las entradas así que entramos.
La verdad es que fue bien, porque hablamos de muchas cosas y muy distintas, una pena que solamos tener problemas de horarios pero bueno, espero que sigamos quedando cuando se terminen las quedadas tandem.

Después del cine, me vine para casa, comí algo y salí porque tenía los conciertos en Botanique. Esta vez, mi acompañante fue Marco. Tras un pequeño problema porque no aparecía en la lista de invitados, pudimos entrar. Se trataba de una serie de cinco conciertos en dos salas de Botanique, así que cuando terminaba uno, íbamos todos en procesión hasta la siguiente.
Una sala era como un pequeño auditorio donde te podías sentar en plan teatro romano, pero bastante pequeño. La otra era más sala de conciertos de cualquier sitio. Los grupos... la verdad... Bueno, voy a admitirlo: nos fuimos antes de que acabaran porque no podíamos más. Los grupos eran un poco... no sé... moñas, para dormir, ruido... "modennos indies" pero no nos llegaron a convencer. Sólo Scott Matthew y una canción, porque el resto era bastante triste también.

En fin, tuvimos la suerte de salir y que pasaba el último tranvía así que nos fuimos cada uno a casa, mandándonos mensajes para no quedarnos dormidos durante el camino debido a la hipnosis que llevábamos de los conciertos. Ouuuuuuuuuch.

No hay comentarios:

Publicar un comentario