viernes, 16 de diciembre de 2011

Mardi: excursion à Namur.

El martes me desperté con viento, lluvia... ¡día perfecto para una excursión! (ironía). La excursión empezaba a las ocho de la mañana (WTF?) y nos sentíamos todos como en el cole ya que íbamos en un autobús para nosotros y nos pasaron lista... Ohh. La diferencia es que en vez de luchar por sentarse en los sitios de detrás, Val y yo corrimos para sentarnos en la planta de arriba, primera fila.
El camino hacia Namur fue bastante... nos dormimos.
Allí llegamos y fuimos al museo de artes antiguas, un poco pequeño y sin mucho que ver, donde había una exposición sobre el color azul. Algunos vimos un video bastante interesante donde contaba la evolución del color azul, cómo ha pasado a ser visto, sobretodo cuando se vio la tierra desde el espacio, cómo la Virgen María pasó de estar vestida en negro a azul, cómo a los egipcios les gustaba el color, cómo se conseguía, cómo pasó de ser un color funerario a bien visto...
Y la exposición luego era pequeñita pero había algunos objetos muy bonitos.

Después, nos dejaron más de dos horas de pausa y con el "buen tiempo" que hacía, nos metimos en algunas tiendas para hacer tiempo y estar secas y cuando dieron las 11h30, nos fuimos al Pizza Hut a ... COMER, es lo que tiene juntarse con una québecoise, que a las doce y media estaba esperando mi pizza con ansia porque tenía hambre.
El siguiente museo que visitamos fue el museo de Félicien Rops, un litógrafo de allí muy reconocido. La verdad es que ese museo no gustó mucho a todos, las litografías causaron mucho escándalo porque denunciaba el trato dado a la mujer (entre otras cosas, pero fue famoso sobretodo por eso) y algunas obras eran bastante eróticas. Hizo trabajos para Baudelaire, de quién era muy amigo, para Les Fleurs du Mal así que sabiendo cómo es la obra, os podéis imaginar también cómo eran las litografías. Y para quién no, fue un libro "tan atrevido" porque no hablaba de temas "católicos" que lo censuraron en Francia, y lo tuvo que publicar en Bélgica (Belgium wins).
Tras la visita a este museo, y posterior visita guiada a una parte en la que nos mostraron una exposición de Rodin y Rops, tuvimos más tiempo libre. Por cierto, en guía del museo llevaba el iPad, ("to modenno") para enseñarnos algunas obras... ¡Qué modernidades!

Nos fuimos al mercadillo navideño con Alejandra y Pedro, pero fue otra decepción: de todo menos cosas de Navidad, sólo las lucecitas. Aunque bueno, era sobretodo de comida y como estaba vacío por la lluvia, estuve comiendo salchichón de distintos tipo que me iban cortando de un puesto (en todos los puestos te dan a probar).
Pero empezó a llover de nuevo... así que nos fuimos con Akvile y Anna a un café a tomar un chocolat chaud mientras que hacíamos tiempo para ir a buscar al autobús de nuevo. Fue una merienda muy internacional ya que éramos una italiana, una québecoise, una lituana y una española.
Nos fuimos dando un paseo hacia el autobús, que iba a aparcar cerca de la citadelle, una zona muy bonita. La verdad es que Namur me pareció bonito, agradable y tranquilo, como una ciudad en miniatura. Lo malo fue el tiempo que hizo que no viéramos bien la ciudad porque no se podía estar en la calle.
Y pasando por el puente para cruzar pasó lo que tenía que pasar: lluvia, viento, coches charcos... pasa un coche que hace una ola, me giro de la impresión, pasa otro y me moja la otra parte del cuerpo. ¡Bieeeen! Acabamos todas con los pantalones chorreando gracias a los simpáticos conductores.

Ya en el autobús de vuelta estuvimos charlando, tras una carrera para volver a conseguir nuestros asientos como las dos turcas que también querían sentarse como antes.
Mención especial al simpático conductor de autobús que tenía voz de locutor de radio y nos deseaba buen viaje, buen día y feliz navidad. ¡Era genial! No suele ser como los autobuseros que nos solían tocar en las excursiones, casi siempre serios y con pinta de cabreados, éste era muy... digamos... "belga".

Por la noche iba a ir a la Polish Night con Dani y más gente pero la verdad es que entre la excursión, la lluvia... me entró mucha pereza y me quedé en casa tranquilamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario