miércoles, 21 de marzo de 2012

Lundi: le début d'une autre longue semaine.

El lunes el despertador fue como el sonido de un taladro a la hora de la siesta. ¡¡Quée horror!! Qué mal sientan ciertos lunes...
Fuimos al trabajo a cada cual más cansada y esta vez me tocó en la mesa entre Daniel y Wim. Como no había ordenadores libres, Anne llevó su portátil (en alemán, que parecerá gracioso pero había veces que tenías que acordarte de dónde está todo realmente al no entender ni papa). Terminó la mañana y apagué el ordenador (os cuento estos detalles porque obviamente llevan a algo) pero se me fue la pinza completamente y le di al interruptor del ladrón pensando en "Wim y Daniel también tienen portátil" con un "Oh no, puede que los portátiles no tengan batería" a un "¡¡NOOOOOOO NO TIENEN PORTÁTILES!!". Y sí, efectivamente les apagué los ordenadores. Daniel soltó un "¡¡¡¡NO!!!!" con las manos a la cabeza, pero después se rió y dijo que no pasaba nada, que no estaba haciendo nada muy importante. Wim, con la tranquilidad que le caracteriza, cuando se enteró (porque no estaba en ese momento en su sitio) dijo "Ah, ¿me has apagado el ordenador? Ah vale... perfecto". Os podéis imaginar cómo me quedé yo de bloqueada/roja. Pero todos bromearon, Christina dijo que a todos les había pasado alguna vez, que no pasaba nada, pero vamos, vaaya tela.
Puis, facultad, clase y quedada de grupo para terminar la presentación para el día siguiente.
Iba a ir con Max al cine a ver The Iron Lady pero al final le dije que no porque quería terminar de repasarme la exposición y estaba muy reventada...
Cenamos Sara y yo y nos acostamos muy pronto porque al día siguiente me tocaba madrugón de los buenos, y ella quería despertarse más o menos igual...

No hay comentarios:

Publicar un comentario