lunes, 10 de octubre de 2011

Mardi: Érase una vez una niña a un iPod pegada...

El martes fue un día de estrés, enfado y mi gran salvador: el Ipod.
Me pasé tooooooodo el día pegada al iPod, mandándome emails con la coordinadora, todo para enterarme que en realidad dejan otra semana para firmar el Contrato de asignaturas... pero bueno, al menos ya lo tengo hecho.
No fui a clase de Alemán porque me fui al despacho a buscar a la coordinadora. No estaba... pero al menos conocí a una italiana muy muy simpática con la que he coincidido otros días.
Momento importante del día: ¡¡por fin conocí a Valérie!! ¡La canadiense con la que estuve buscando piso para vivir juntas! Vamos a hacer juntas una asignatura que se llama Tandem y consiste en quedar entre nosotras y hacer una hora de conversación en español, y otra hora en francés, hacer trabajos juntas, ayudarnos e ir mejorando ella su español y yo mi francés.
Tuvimos una reunión con la coordinadora que nos explicó cómo teníamos que hacer los rendez-vous, cuántos... etc y la verdad es que muy bien. Fue bastante raro verla en persona por fin, pero muy guay.
Después, la acompañé al despacho del coordinador de los Erasmus, ya que tenía que resolver un problema con su carte d'étudiante et puis, nos fuimos juntas a clase de Instituciones Europeas. Me apunté a esa asignatura un poco... por hacer el papel de "Estoy en Bruselas, voy a apuntarme a esta asignatura especial para los Erasmus blablabla..." pero no me imaginé ¡que me pudiera parecer tan interesante! Fue un introducción y un poco de historia mais bon, me gustó mucho. Además, eso de que seamos sólo Erasmus, hace que la clase sea más vista a nosotros y no tan general como las otras.
En fin, de esa clase me fui a la siguiente con nuestro profesor que tanto nos gusta con Sandra y Andreia, las dos portuguesas que también se apuntaron.
De allí corriendo a casa, para seguir escribiéndome con la coordinadora del acuerdo de estudios (lo he obviado pero me pasé todas las clases con el iPod pegado enviándome emails con ella: que si tengo pocos créditos, que si tengo muchos... que si no sé qué... que si esa asignatura no se corresponde con la otra, que si ella tiene la misma información que yo ( y luego me averigua cosas que yo no sabía) En fin... me di cuenta de que a veces hay que ser MUY pesada para conseguir lo que se quiere.
Salí de clase, como he dicho antes, corriendo para ir a casa y terminar con el contrato de estudios y organizar un poco lo que iba a hacer el miércoles.
Iba a quedarme en casa con Sara pero Irene me recordó que era la Palestinian Night: una noche en la que un bar haría temática de Palestina con comida, música, etc... así que nos apuntamos unos cuantos para ir. El problema fue que con la tardanza española e italiana, llegamos un poco tarde y sólo pudimos comer pan de pita (gracias a Madou que lo consiguió); y el té que había era... Hornimans, no muy típico que digamos; pero bueno, bailaron la danza típica de allí y estuvo curioso. Hicieron hasta una especie de "trivial" en el que regalaron palestinos, banderitas... etc. Por supuesto, nos encaprichamos de un palestino, pero nos daba vergüenza subir al escenario.
Pasamos un ratillo allí y Madou, Anna y yo nos volvimos pronto para coger el tranvía, ya que al día siguiente nos esperaba a Maddi y a mi un laaaargo día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario